Al principio, existía el “quiet quitting”. Y era bueno.
Los “Gen Z” y Millennials quemados de todo el país dejaron de excederse en el trabajo para dedicar más tiempo a la salud mental.
La tendencia de Tik Tok se transformó en una serie de ramificaciones, incluyendo el despido silencioso, la contratación silenciosa y la renuncia rápida.
Pero ahora, algunos trabajadores empiezan a decir basta. Desean que los que renuncian en silencio lo hagan de una vez.
Una nueva encuesta realizada por LLC.org ha analizado los hábitos más molestos de los compañeros de trabajo y ha descubierto, como no podía ser de otra manera, que las renuncias silenciosas se encuentran entre las más irritantes.
Resutados de la encuenta
Más de seis de cada diez (62%) consideran que esta tendencia es increíblemente molesta. Y más de la mitad (57%) afirman haber visto recientemente a un colega que ha “renunciado en silencio”.
De ellos, el 57% dice que ha tenido que asumir más trabajo porque su colega ha decidido hacer menos.
La Generación Z y los Millennials empezaron a renunciar silenciosamente. Así que quizás no debería sorprender que los Baby Boomers y la Generación X sean los más hartos de esta tendencia.
Pero la mayoría de la Generación Z y los Millennials también lo desaprueban, calificándolo de “antitrabajo”.
Otros hábitos molestos de los compañeros de trabajo
LLC.org encuestó a 1.005 empleados a tiempo completo en todo EE.UU. El 50% de los encuestados eran hombres y el 50% mujeres, con una edad media de 38 años.
Y vaya si eran irritables
La mayoría de los trabajadores (83%) dicen que trabajan con alguien que les molesta.
Según los encuestados, el 22% dice que esto ocurre a diario, mientras que casi la mitad (47%) dice que ocurre algunas veces a la semana.
La generación Z es la más molesta, según la encuesta, y el 59% de los encuestados dice que los Z son los menos productivos.
Los compañeros de trabajo presenciales son más molestos que los remotos, y los de nivel medio son los peores de todos los niveles (33%).
Otras molestias de los compañeros de trabajo son: las quejas, la pereza, la arrogancia y las interrupciones.
Y las frustraciones de los trabajadores no se limitan a la forma de actuar. Sino que también les molesta la forma de hablar.
Estos son algunos de los términos que no les importaría que se prohibieran para siempre en la oficina.
“Quiet Quitting”(Renuncia silenciosa) no estaba en la lista, pero probablemente debería estarlo.
